miércoles, 12 de febrero de 2014

Cuidados para la higiene de los ojos.



Si tuvieras que elegir solo un sentido, ¿cuál tendrías más miedo de perder? Si eres como la mayoría de las personas, es probable que tu respuesta haya sido "la vista". Y es que en un mundo fundamentalmente visual, la mayor parte de la información nos llega por medio de este sentido. La vista es, entonces, muy importante. Por ello, es hora de que comiences a cuidarla: ¿qué tal si aplicas estos 3 cuidados para la higiene de los ojos?


1-Consume vitamina A y antioxidantes

No te olvides de consumir zanahorias y todos los alimentos que sean ricos en vitamina A. Este nutriente es imprescindible para disfrutar de unos ojos sanos y su deficiencia puede derivar en enfermedades como la xeroftalmia. Esta comienza a secar la córnea y, si no recibe el tratamiento adecuado, puede causar la ceguera. 

Llena tu refrigerador de moras, arándanos y brócoli. Estos alimentos te aportarán los antioxidantes que necesitas, te ayudarán a prevenir el deterioro celular de tus ojos y te protegerán de la degeneración macular, una enfermedad muy severa asociada al envejecimiento. 

2-Evita peligros y accidentes

Algunos expertos afirman que el 90% de los daños oculares puede prevenirse. Lo único que tienes que hacer es cuidarte en las circunstancias (como la práctica de deportes o algunas tareas domésticas) que convierten a tus ojos en un blanco fácil.

Estáte alerta: presta atención en todo momento a lo que está sucediendo a tu alrededor. Y, si tienes la posibilidad, cómprate lentes protectores. 

3-Valora tu vista

"Solo valoramos lo que tenemos, cuando lo perdemos". Esta es una realidad muy frecuente; no permitas que sea la tuya. Concientízate de todas las posibilidades que te abren tus ojos y cuídalos en todo momento. Para ello, toma las siguientes precauciones:
Lee con buena luz. La iluminación tenue no lastimará tus ojos, pero hará que se cansen más rápidamente. 
Mira la televisión con la luz encendida. Si sientes que la oscuridad te causa incomodidad, no dudes en prender la luz. Esta acabará con el problema.
Usa tus lentes. Si no puedes ver sin ellos, úsalos. No fuerces tu vista innecesariamente.

Posiciona bien tu monitor. Colócalo a la altura de tus ojos y a una distancia más lejana de la que colocarías un libro, a la hora de leer. 
Toma descansos. Cuando estés implicado en cualquier actividad, regálate intervalos de descanso. De esta manera, permitirás que tus músculos se relajen. 

Aplica estos 3 cuidados de la higiene de los ojos. Ellos no son solo nuestra ventana al mundo, sino que, como bien lo supo afirmar William Blake, "los ojos son la ventana al alma".

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